La Celebración Espiritual importante del año
Por Glenn Mendoza, MD
“Ningún costo que se nos exija pagar es demasiado elevado, siempre que este sea de utilidad para La Jerarquía en el período del Festival de Wesak. Ningún precio es demasiado alto para ganar la iluminación espiritual, ya que esta puede ser posible.”
(Proverbio Tibetano)
El Festival de Wesak es una ceremonia espiritual y sagrada que se celebra en la luna llena del mes indio de Vaisakh (también llamado Wesak). Coincide con el aniversario del nacimiento del Señor Buda, el momento en que alcanza la iluminación, y la partida de su encarnación terrenal. El Festival de Wesak, la luna llena de Tauro y la luna llena más poderosa del año, son el resultado de construir un puente entre la humanidad y lo Divino. Durante este día, las fuerzas de la iluminación que emanan dela Mentey el Corazón de Dios, descienden sobre la conciencia humana.
Cuenta la leyenda que esta maravillosa costumbre se lleva a cabo en un remoto valle sagrado, situado en la parte norte de los Himalayas cerca a Nepal y a Lhasa, en el que los Grandes Seres se reúnen para vivenciar un potente vertimiento de Energía Divina dirigida al Propósito y al Plan Divinos. Esta celebración, con toda su importancia esotérica, ocurre a diferentes niveles de conciencia –en los planos físicos, emocionales, mentales y espirituales de la existencia-. En el valle cerca al Monte Kailash tiene lugar la reunión física de aspirantes espirituales incluyendo a los monjes. Se cree que los discípulos espirituales asisten deliberadamente el ritual sagrado en sus cuerpos astrales, otros en sus cuerpos mentales y los más avanzados en sus cuerpos espirituales.
Si uno asiste a la ceremonia, es posible que uno conserve o no el recuerdo consciente de esta experiencia. Este recuerdo depende de la pureza de la conciencia de uno mismo y del nivel de contacto que uno tenga con estados superiores. Así como asegura Grand Master Choa: “existe un efecto definido de la experiencia espiritual de la meditación Wesak independientemente de la capacidad del cerebro para comprenderlo o registrarlo.” Si los cuerpos más elevados se encuentran desarrollados y son puros, el discípulo podría experimentar la ceremonia sagrada en ese mismo nivel, en toda su solemnidad, belleza y magnificencia. Otros aspirantes podrían saborear y sentir la energía de la belleza, la alegría, y la dicha, pero no retendrían ningún recuerdo de la experiencia. El recuerdo de la experiencia es directamente proporcional al grado de contacto del alma y al desarrollo de los cuerpos energéticos, para tender un puente entre el alma encarnada y el Alma Superior. Esto se logra mediante nuestras propias purificaciones internas y externas, la meditación y “la voluntad para hacer el bien” a través del servicio. De esta forma se logra un balance y un equilibrio.
Asiste en compañía de tus seres queridos y únete a miles de personas de diversas culturas y tradiciones alrededor del mundo que realizan de forma simultánea esta maravillosa meditación.
La invitación es para que nos hagamos presentes y seamos partícipes de esta extraordinaria celebración, dándonos la oportunidad de ser instrumentos de servicio al bendecir la Tierra.
